Mariana Flores Melo - Las Rutas del Legado Andalusí, ocho recorridos históricos por Andalucía, Murcia y Portugal

Las huellas de al-Ándalus no solo están presentes en nuestra cultura actual, sino que la han marcado profundamente. Las Rutas del Legado Andalusí recorren esos vestigios y nos guían por los senderos que antaño fueron trazados para comunicar el Reino de Granada con el resto de Andalucía y con Murcia, pero también fuera de nuestras fronteras: con Portugal.

Ruta del Califato

La Ruta del Califato discurre entre Córdoba y Granada a través de un amplio patrimonio histórico, monumental y, por supuesto, paisajístico. Ambas ciudades fueron en su momento capital del al-Ándalus califal y nazarí, y el camino que las unía era uno de los más transitados de la península ibérica. Era constante el trasiego de comerciantes venidos de todo el mundo que transportaban sus mercancías para venderlas en las estas dos importantes poblaciones.

Pero más allá de una ruta comercial, también fue una ruta del saber, de las ciencias y las artes. Córdoba fue un relevante centro cultural musulmán durante ese periodo califal, una ciudad verdaderamente adelantada a su tiempo. Por su parte, Granada puede presumir de contar con la más valiosa joya de la arquitectura hispano-musulmana: la magnífica Alhambra.

Partiendo desde Córdoba, la ruta trascurre por los pueblos de Fernán Núñez, Montemayor, Montilla, Aguilar de la Frontera, Lucena, Cabra, Carcabuey, Priego de Córdoba, Espejo, Castro del Río, Baena, Zuheros y Luque, antes de pasar a la provincia de Jaén. Por las tierras jiennenses recorre las localidades de Alcaudete, Castillo de Locubín y Alcalá la Real. Finalmente, ya en la provincia de Granada, pasa por Colomera, Moclín, Pinos Puente, Güevéjar, Cogollo Vega, Alfacar y Víznar.

Ruta de los Nazaríes

Una constante sucesión de castillos y atalayas nos acompañarán durante la Ruta de los Nazaríes. Estas edificaciones formaron un impresionante sistema defensivo levantado tanto por cristianos como por musulmanes. Algunos ejemplos son las torres de Deifontes, Torre Cardela e Iznalloz, y los castillos de Cambil, Montejícar y Píñar.

El recorrido empieza en la pedanía de las Navas de Tolosa, Jaén, y se adentra en las tierras de donde era originaria la Casa Nasar, los fundadores de la dinastía nazarí. Además de sumergirse en un entorno natural espectacular, los Parques Naturales de Sierra Morena, Cazorla, Segura y las Villas, los aventureros visitarán localidades tan bonitas como Baños de la Encina, Bailén, Andújar, Arjona, Torredelcampo, Úbeda, Baeza, Alamedilla y Píñar hasta llegar a Granada.

Ruta de los Almorávides y Almohades

La Ruta de los Almorávides y Almohades parte de la ciudad de Tarifa y nos descubre la historia de estas dinastías de origen africano que dejaron una importante huellas en la arquitectura de al-Ándalus.

El recorrido puede hacerse por dos ramales diferentes por las provincias de Málaga y Cádiz. Uno de ellos se dirige hacia Ronda, pasando por Castellar, Jimena de la Frontera, Gaucín y los pueblos del valle del río Genal. Por otra parte, con la segunda opción se visita Alcalá de los Gazules y Medina Sidonia, Cádiz, El Puerto de Santa María, Jerez, Arcos y los pueblos blancos gaditanos para terminar también en Ronda. La continúa hacia Teba, Campillos, Vélez-Málaga y, finalmente, Granada.

Ruta de Las Alpujarras

La Alpujarra es una región de un rico folclore marcado por todas las culturas que han pasado por el lugar. Una buena forma de sumergirnos en esta cultura es a través de la Ruta de las Alpujarras, un interesante recorrido que une Almería y Granada a través impactantes paisajes como el desierto de Tabernas hasta llegar a la vega del río Genil.

A ese rico entorno natural, se suman los restos de fortificaciones medievales que iremos encontrando por el camino y el valioso patrimonio arqueológico andalusí. El legado de al-Ándalus en la zona es palpable en su arquitectura, marcada por los gruesos muros de piedra sobre los que se apoyan troncos de roble o castaño, los tejados de pizarra y los típicos terraos y tinaos alpujarreños.

Desde Almería, la ruta se encamina hacia Lanjarón y continúa por el Valle de Lecrín. Concretamente, se visitan pintorescos pueblos como Pechina, Benahadux, Laujar de Andarax, Cástaras, Laroles, Juviles, Trevélez, Bubión, Pampaneira y Dúrcal.

Ruta Ibn al-Jatib

La Ruta Ibn al-Jatib sigue las huellas del último gran polígrafo de la España musulmana y nos descubre los restos árabes que se conservan en poblaciones como Lorca, Vélez Rubio, Albox, Baza y Guadix.

El recorrido inicia en Murcia y finaliza en Granada, pasando por Almería. Ibn al-Jatib realizó esta ruta en 1347, acompañando al rey Yusuf I, con el objetivo de comprobar e inspeccionar las defensas de la frontera oriental del reino granadino. Ahora, al igual que antaño, los viajeros podrán admirar la belleza natural de estar tierras accidentadas llenas de montañas y desfiladeros.

Asimismo, la ruta atraviesa villas con un patrimonio monumental fascinantes, donde destaca el castillo de Lorca o el castillo-alcázar de Vélez Blanco. También se pasa por otras localidades como Alhama de Murcia, Vélez Rubio, Puebla de Don Fadrique, Huéscar, Guadix y Huétor Santillán.

Ruta de Al-Idrisi

El geógrafo al-Idrisi describió y documentó esta ruta entre Málaga y Granada, de modo que a día de hoy podemos saber como era al-Andalus del siglo XII. El camino nos guía por las encantadoras localidades de Marbella, Torrox, Frigiliana, Nerja, Almuñécar, Salobreña, Motril, Vélez de Benaudalla, Lecrín, Mondújar, Nigüelas, Padul y Alhendín.

Además de la cultura y la historia andalusí, la otra protagonista del recorrido es la naturaleza. Estas son tierras de valles, lagunas, bosques de tejo, parques naturales, campos de almendros, calas diminutas, cuevas y humedales.

Ruta de los Omeyas

La Ruta de los Omeyas se inicia en Algeciras, la puerta de entrada del islam en la península ibérica, y se abre paso hacia el corazón de la provincia de Cádiz hasta llegar a Medina Sidonia. De ahí pasa a la ciudad de Sevilla, que pasó a ser una de las principales ciudades de al-Andalus. Continuamos hasta la vecina Carmona, dónde se asentaron tribus árabes de Yemen, como los lbn Jaldún.

El recorrido continúa por el valle del Genil, donde nos encontraremos con la ciudad de Écija. Desde allí visitaremos Córdoba, centro del poder omeya, así como a Carcabuey, Priego de Córdoba, Zuheros, Alcalá la Real, Jaén y Almuñécar, puerto de entrada del exiliado emir omeya Abderramán I. Finalmente, daremos nuestros últimos pasos en la ciudad de Granada.

Ruta de al-Mutamid

Las rutas del legado Andalusí no se limitan al territorio español, tal y como demuestra la Ruta de al-Mutamid. Esta se extiende de Lisboa a Sevilla, pasando por Huelva y es uno de los caminos más ricos de al-Andalus, pues al patrimonio andaluz se suma el del Portugal musulmán. Recibe el nombre de al-Mutamid en honor a este rey de Sevilla que fue en su juventud el gobernador de Silves, una población del Algarve.

Para completar la ruta podemos elegir entre dos ramales. El que trascurre por la costa pasa por Setúbal, Alcácer do Sal, Aljezur, Sagres, Lagos, Silves, Albufeira, Paderne, Loulé, Faro, Tavira y Vila Real de Santo António, en Portugal, y Ayamonte, Lepe, Huelva, La Rábida, Palos de la Frontera, Moguer, Niebla, La Palma del Condado y Sanlúcar la Mayor, en Sevilla.

Por otro lado, el ramal del interior, nos descubre Vendas Novas, Montemor o Novo, Évora, Beja y Mértola, en Portugal, y Aroche, Cortegana, Almonaster la Real, Aracena, Tocina y Santiponce, en España.

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