Mariana Flores Melo - La ciudad belga famosa por sus aguas termales que alberga uno de los casinos más antiguos del mundo
Al sur de Bélgica, en la región francófona de Valonia, se encuentra un ciudad mundialmente conocida por sus aguas terminales. Spa es una de las 11 ciudades que pertenecen a "Las Grandes Ciudades Balneario de Europa", una selecta lista con título de Patrimonio de la Humanidad.
Denominada "la perla de las Ardenas" por la UNESCO, Spa tiene el privilegio de contar con manantiales de agua mineral y termas que, junto a su casino, la convirtieron desde el siglo XVIII en un destino de descanso y ocio de la aristocracia y realeza europea. Además, hay teorías que indican que el sustantivo "spa" viene precisamente de esta ciudad que ya frecuentaban los romanos en su época.
El agua de Spa
Esta ciudad belga es reconocida por sus aguas ferruginosas, es decir, aguas enriquecidas en hierro bivalente, por lo que son recomendadas para las anemias ferropénicas, trastornos del desarrollo, convalecencias e hipertiroidismo. Incluso, hay una marca de agua embotellada originaria de las Ardenas, Spa Reine.
Hay varias fuentes por la ciudad, pero la más famosa es la Fuente Ferruginosa Pedro el Grande, nombrada en honor al zar Pedro I de Rusia al quedar maravillado por sus supuestos poderes curativos. Se trata de un edificio del 1880 que alberga exposiciones sobre esta agua, una colección de obras de Joan Miró y un cuadro que agrupa 96 personalidades que visitaron Spa, como Offenbach, Victor Hugo o Montaigne. Y por supuesto, la propia fuente de agua gaseosa.
Bienestar en los baños termales
Es evidente que el principal atractivo son los baños termales. Las Termas de Spa es un moderno complejo de 800 m² que mezcla técnicas de bienestar modernas con la tradicional hidroterapia, con espacios techados y al aire libre. La entrada para menores de 15 años está prohibida y pasar un día completo en este balneario tiene un precio de 45 euros.
El casino de Spa, una joya histórica
El casino de Spa es el segundo más antiguo de Europa, su construcción data de 1763 y sigue operativo. En esta liga de antigüedad le gana el Casino de Venecia, inaugurado en 1638, mientras que en tercer lugar se encuentra el casino de Karhaus de Baden Baden, en Alemania, un complejo de spa y casino diseñado en 1824.
Desgraciadamente, apenas quedan resquicios de la estructura original, pues fue reconstruido tras varios incendios. Recuperó su esplendor en los años 80 del siglo pasado después de una obra de remodelación.
Del relax a la velocidad
A 10 kilómetros del casco urbano de Spa se encuentra el circuito de Fórmula 1 Spa-Francorchamps. Inaugurado en 1921, era un circuito en su origen peligroso por las rectas rápidas, las grandes curvas y el clima impredecible de la zona, que fue motivo de varios accidentes letales. Se realizan visitas guiadas todos los días entre los meses de marzo y noviembre por un precio de 15 € y de 8€ para los menores de 14 años.
Cómo llegar a Spa
A Spa solo se accede por carretera o tren. Si es en avión, se debe ir a un aeropuerto cercano como el de Bruselas o Lieja. La ciudad cuenta con estación de tren a la que se puede llegar desde Lieja y Bruselas por alrededor de 20 y 60 euros el billete de ida y vuelta, respectivamente.
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