Mariana Flores Melo - Cinco de los pueblos más bonitos de España están en Asturias: mar, montaña e historia
Nuestro país está repleto de lugares con encanto y muchos de ellos se ubican en el norte de España. Asturias, sin ir más lejos, es una de las comunidades que más turistas atraen a lo largo del año, gracias a sus inconfundibles paisajes en los que el verde de las montañas y la naturaleza se fusiona con el azul intenso del mar. No en vano, se trata de una región repleta de historia que también se manifiesta a través de sus calles medievales, emblemáticas construcciones y casitas de pescadores.
Teniendo todo esto en cuenta, no es de extrañar que cinco de los municipios situados en el Principado de Asturias hayan entrado a la lista oficial de la asociación de Los Pueblos Más Bonitos de España. Un ránking formado por algunos de esos rincones españoles que merece la pena visitar, al menos, una vez en la vida, ya sea en pareja o en familia.
Bulnes
El secreto del éxito de Bulnes reside, en gran medida, en su complicado acceso. Se trata de un pueblo al que se puede llegar por funicular o andando por un camino estrecho y empinado, lo que le ha permitido mantener su patrimonio y una gran belleza con el paso de los años, tal y como detallan desde la asociación. Desde Bulnes, es posible hacer excursiones a las montañas cercanas o simplemente disfrutar de la naturaleza, pero también visitar algunos de sus mejores bienes.
La Torre del Castillo o la Iglesia de San Martín de Bulnes, ubicadas dentro del Patrimonio Cultural de Asturias, son solamente dos de las edificaciones del pueblo que merecen una visita. Además, de esta parroquia que pertenece al municipio de Cabrales hay que destacar, precisamente, el queso Cabrales, por su calidad artesanal.
Cudillero
Cudillero es un pueblo costero situado en una ladera que desciende hacia el mar. Sus coloridas casas que se asoman al puerto pesquero y sus estrechas callejuelas serpentean por el pueblo, creando un ambiente pintoresco y acogedor que merece una (o varias) fotografía. Desde este pueblo, además, se puede acceder a numerosas playas de arena fina y aguas cristalinas, lo que lo convierte en un destino de verano ideal.
Hay que destacar que en la villa de Cudillero se habla un dialecto propio, el pixueto, que poco a poco va cayendo en desuso. No así, sus tradiciones, pues su emblemático ambiente pesquero está muy vivo todavía.
Llastres
Situado en un acantilado que domina el mar, Lastres es un pueblo marinero con un casco antiguo de estilo medieval. Sus calles empedradas y sus casas de piedra y madera han servido de escenario para numerosas películas y series de televisión, como la famosa Doctor Mateo. Sus orígenes se remontan a la época romana y el primer testimonio escrito sobre este asentamiento data del año 943.
Además, cuenta con una iglesia del siglo XVI y un mirador con vistas espectaculares al mar y a la costa asturiana. En los alrededores de Lastres también es posible visitar la Ruta del Jurásico, una serie de yacimientos paleontológicos que muestran la riqueza geológica de la región.
Tazones
Declarado Conjunto Histórico-Artístico, es un pequeño pueblo marinero situado en el municipio de Villaviciosa, en pleno corazón de la Comarca de la Sidra del Principado de Asturias. Pese a su reducido tamaño, hay bastantes atractivos que ver de los que destaca su espectacular conjunto urbano. Tazones se divide en los barrios de San Roque y San Miguel.
Este pueblo tiene una gran historia, ya que fue el lugar donde desembarcó el emperador Carlos V cuando llegó a España en 1517. Llaman especialmente la atención sus casas marineras, entre las que destaca la denominada Casa de las Conchas, además de la iglesia de San Roque.
Torazu
Torazu es un pueblo situado en el corazón de los Picos de Europa y considerado uno de los más bonitos de España. La principal atracción de Torazu son sus hórreos, construcciones de madera y piedra que se utilizaban para almacenar el maíz. En el pueblo se pueden encontrar más de 20 hórreos, algunos de ellos con más de 200 años de antigüedad.
Además, Torazu cuenta con una iglesia románica del siglo XIII y numerosas rutas de senderismo que permiten descubrir los impresionantes paisajes de los alrededores, como por ejemplo, el Campo de la Sienra, donde envejece un hermoso microbosque de robledales.
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