Ruta por el Madrid de los Austrias en septiembre: rincones desconocidos y restaurantes míticos
El denominado Madrid de los Austrias es la zona de la capital española que transcurre por el conjunto de monumentos que se erigieron durante el reinado de los Habsburgo en nuestro país.
Esta dinastía, que comenzó con el reinado de Carlos I y continuó, posteriormente, con el reinado de Felipe II, dejó en la ciudad un rico patrimonio a modo de palacios y monumentos de estilo renacentista y barroco.
En la capital se pueden encontrar free tours que llevan a conocer los monumentos más característicos de los Austrias, así como otras visitas guiadas que, de igual modo, hacen diferentes tours por esta zona, como en Segway, de diferente duración. También, apuntando una serie de lugares, puedes hacer tu propia ruta para contemplar el legado de los Austrias en Madrid.
Aunque seguramente muchos de los lugares de este Madrid de los Austrias sean conocidos por la mayor parte de los madrileños, hay otros lugares de mucho interés que pasan desapercibidos. No es el caso de la parada obligada para todo aquel que quiera recorrer el Madrid de los Austrias: la Plaza Mayor. Junto a esta, que en época de los Austrias era de menor tamaño, se encuentran también en este recorrido la Plaza de Oriente y la Plaza de la Villa. Las tres plazas marcan los puntos clave del recorrido por el casco histórico de Madrid.
Otra de las paradas obligadas es, sin duda, el Palacio de Santa Cruz. Según la página oficial de turismo de Madrid, este palacio de planta rectangular fue construido en el siglo XVII y, actualmente, es la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores, El edificio principal se construyó entre 1629 y 1736 por orden de Felipe IV como Cárcel de Corte y Sala de Alcaldes.
El Palacio Real de Madrid es otra de las paradas fundamentales. Data del siglo XVIII, pero se asienta sobre el solar del antiguo Alcázar de Madrid, fortaleza medieval convertida en palacio, que Felipe II convirtió desde 1561 en la residencia oficial de los reyes de España, según la web de Patrimonio Nacional.
La Iglesia de San Ginés es otra de las paradas obligadas en esta ruta. Se encuentra en la calle Arenal y está dedicada al santo francés San Ginés de Arlés. Es una de las iglesias más antiguas de Madrid, construida en 1645, aunque ha sufrido diferentes restauraciones y modificaciones a lo largo de su historia.
Otra parada es la Iglesia de San Nicolás de Bari. Construida en siglo XII, es la más antigua de todo Madrid. Su templo es del siglo XV y conserva varios elementos medievales. La nave y las capillas son del XVII, y el pórtico de entrada de granito, con la imagen de San Nicolás, obra del escultor Luis Salvador Carmona, es de comienzos del siglo XVIII, según la web oficial de turismo de Madrid.
Parada obligada, sin duda, es el Teatro Real de Madrid, obra del arquitecto Antonio López Aguado, bajo el reinado de Isabel I. Este teatro se inauguró en 1850. Está situado muy cerca de Sol y fue uno de los principales teatros europeos durante 75 años.
No podía faltar tampoco la Catedral de La Almudena. Esta es la Catedral de Madrid, en pleno Madrid de los Austrias. Los primeros planos de la iglesia fueron trazados en 1879 para que sirviese de panteón para la fallecida reina María de la Mercedes. Sin embargo, cuando el Papa León XIII otorgó en 1885 la bula por la que se creaba el Obispado de Madrid-Alcalá, este proyecto de iglesia se transformó en catedral.
Palacio del Duque de Uceda, también dentro de esta ruta del Madrid de los Austrias, es de estilo barroco y es uno de los pocos ejemplos que quedan de la arquitectura residencial nobiliaria del siglo XVII. Fue construido por encargo de Cristóbal Gómez de Sandoval-Rojas, primer duque de Uceda, valido de Felipe III.
Después de hacer una ruta por todos estos monumentos y legados de los Austrias, se puede parar a comer por algunos de los míticos restaurantes del casco histórico de Madrid, es decir, por la misma zona del Madrid de los Austrias.
Sin duda, uno de los principales atractivos gastronómicos de la zona es el Mercado de San Miguel, tal y como se indica en la web oficial de turismo de Madrid. Levantado sobre una estructura de hierro de 1916, acoge numerosos puestos gourmet y establecimientos donde disfrutar del tapeo salado y también dulce.
Durante el verano y los días de buen tiempo, es recomendable pasarse por la plaza de Santiago, que cuenta con varias terrazas. Además, el barrio de Austrias cuenta con una amplia oferta de bares y restaurantes, como Los Galayos o Cervecería Plaza Mayor, en los se puede tapear. Recomendable es probar el tradicional bocata de calamares y pasarse después por las cafeterías centenarias, como la de San Ginés. Centenario es también el restaurante Casa Botín, célebre por su cocido.
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